El Parque de Málaga es el tercer mejor jardín subtropical de Europa, curiosamente el segundo mejor jardín subtropical de Europa también se encuentra en la Capital de la Costa del Sol, que es el Jardín Botánico Histórico Finca de la Concepción. Solamente superado por la Oratava de Tenerife.
El Parque fue trazado como una prolongación de la Alameda Principal y tiene su origen en una ley de 1896. El entonces presidente del Consejo de Ministros, Antonio Cánovas del Castillo, fue quien impulsó un ambicioso proyecto para ampliar el recinto portuario y conformar la estructura moderna que ha conservado hasta la actualidad. La idea visionaria del político malagueño se convirtió en realidad gracias al proyecto que el ingeniero Rafael Yagüe terminó en 1876.
En el Parque de Málaga hay numerosas esculturas y monumentos:
Como la del burrito Platero de Jaime Fernández Pimentel, que representa al burro de la narración lírica ?Platero y yo? de Juan Ramón Jiménez.
La Nínfa de la Caracola es una estatua y fuente de hierro de gran belleza, como sucede también con la Nínfa del Cántaro (también conocida como La Muñeca) que es una estatua y fuente de bronce de estilo neoplateresco, que representa a una Nínfa que se encuentra sobre una fuente octogonal de interesantes azulejos sevillanos donde aparecen muchas mujeres y elevada sobre un pedestal rocoso que vierte agua desde un cántaro que sujeta en sus brazos.
El monumento a Salvador Rueda se trata de un obelisco obra del escultor Francisco Palma García construido en honor al poeta y periodista malagueño Salvador Rueda Santos. Es de estilo art decó y presenta un relieve con la cara del poeta y está coronado por un águila con las alas extendidas que fue añadida posteriormente y es obra de Adrián Risueño.
El monumento a Rubén Darío es un busto de piedra situado sobre un pedestal. Su autor es José Planes, y homenajea al poeta nicaragüense Rubén Darío.
El monumento a Narciso Díaz de Escovar es un busto de bronce situado sobre un pedestal. Su autor es Juan López Merino, y homenajea al poeta y escritor malagueño Narciso Díaz de Escovar.
El monumento al Marqués de Guadiaro es un busto situado sobre un pedestal. Su autor es Mateu Fernández de Soto y homenajea a Carlos Larios y Martínez de Tejada, patricio y bienhechor que ostentaba el título de I Marqués de Guadiaro. Artífice en la familia Larios en la construcción de la Calle Marqués de Larios y del Parque de Málaga. Tiene un basamento de piedra con una escalera que servía de fuente, encima un pedestal con motivos alegóricos al comercio, la industria, y a Málaga y coronando el busto en bronce.
El monumento al Fiestero es de Miguel García Navas, y homenajea al género musical autóctono de los verdiales, típico de varias comarcas de la provincia de Málaga como la Axarquía y los Montes de Málaga; en una panda de verdiales, se llama fiestero a uno de sus integrantes.
El monumento a Eduardo Ocón Rivas es un busto situado sobre un pedestal. Su autor es Domingo Muguerza, y homenajea al músico y compositor malagueño Eduardo Ocón Rivas, nacido en 1831 y fallecido en 1901. Está situado junto al auditorio que lleva su nombre entre el paseo central del Parque de Málaga y el Paseo de los Curas.
El monumento al Comandante Benítez y a los héroes de Igueriben está situado sobre un pedestal. Su autor es Julio González Pola, y homenajea al comandante Julio Benítez Benítez, héroe de Igueriben que participó en la defensa de esta posición durante la Guerra del Rif y que le valió la obtención de la Cruz Laureada de San Fernando a título póstumo, la cual aparece en relieve en el pedestal. Tiene un basamento de piedra blanca aparece un soldado yacente y, sobre el pedestal, la estatua es de cobre y de estilo clásico, vestido de militar y sosteniendo un sable; a sus pies una pieza de artillería.
El monumento a Bernardo Ferrándiz es un busto de Agapit Vallmitjana i Barbany, y homenajea al pintor valenciano Bernardo Ferrándiz. Se sitúa sobre un pedestal obra de Diego García Carreras.
El monumento a Arturo Reyes es una escultura de Adrián Risueño Gallardo (también escultor de la Fuente de las Tres Gitanillas), y homenajea al novelista y poeta malagueño Arturo Reyes Aguilar. El monumento consta de un busto con la imagen del escritor sobre un pedestal y una figura de una mujer de cuerpo entero situada delante de él. Como nota curiosa la mujer llevaba una rosa en la mano derecha, pero a pesar del empeño del ayuntamiento por restaurarla en múltiples ocasiones, al final, siempre alguien acababa por arrancarle la rosa e incluso la mano.
El monumento a Antonio Muñoz Degrain es un busto de Francisco Marco Díaz-Pintado, y homenajea al pintor valenciano Antonio Muñoz Degrain y es una copia de otro situado en Valencia. Se sitúa sobre un pedestal obra de Diego García Carreras muy cerca del Auditorio Eduardo Ocón.
La estatua del Biznaguero es una escultura realizada por Jaime Fernández Pimentel, que se encuentra en los Jardines de Pedro Luis Alonso. Representa al personaje desempeñando este oficio vestido con el traje típico y portando en su mano izquierda los ramilletes de de biznagas clavados en una penca.
También en el Parque podemos encontrar la Fuente de los amorcillos, de Juan Ruiz de Luna Arroyo. Y una escultura de Alegoría del invierno y otra de Alegoría del verano, esta última evoca el tiempo estival bajo la impronta del personaje femenino vestido con túnica plegada sin cuello, dejando ver uno de los senos a semejanza de las estatuas de la mitología griega del amazonas. Esta estatua de José de Vilches porta un haz o gavilla de espigas como representación de la abundancia.