Unos kilómetros antes de llegar a Alpandeire encontramos Villa Fría, que es la casa de campo de Fray Leopoldo, en la que trabajaba siendo un niño y hoy día son unas ruinas compuestas por dos muros de piedra.
Desde la distancia la estampa de Alpandeire es bellísima con su impresionante iglesia, conocida como la “Catedral de la Serranía”. Y una vez en el pueblo natal de Fray Leopoldo, donde pasó los treinta primeros años de vida, es recomendado visitar “El Cerrajón”, que es el monumento más popular del santo malagueño, erigido por la comunidad Capuchina.
Está en construcción el futuro centro social que lleva el nombre del beato.
En la iglesia de San Antonio de Padua (Catedral de la Serranía), se encuentra la pila bautismal donde fue bautizado Fray Leopoldo, así como una reliquia suya. En la cripta de la iglesia hay dos momias con un sistema de embalsamamiento similar al del Antiguo Egipto.
Caminando por el pueblo, se disfruta una bellísima escultura de Fray Leopoldo en una plaza. Es de interés el antiguo Pósito, edificio restaurado que hoy día es sede de la Asociación de Amigos de Fray Leopoldo y la casa natal, en la que habitó por más de tres décadas.