Magnífica la fotografía de Pedro Serrano de la Peña de los enamorados. La verdad es que no se nos habría ocurrido, por lo menos a mí, el hecho de captar una buena fotografía y colocarla de manera vertical, porque ha quedado genial. Siempre, vemos la cara de un indio o de una mujer tumbada, pero ahora sí que no hay dudas en que la naturaleza ha esculpido de manera caprichosa la cara de una mujer con un cincel natural.